Poder disponer con libertad de los recursos propios para ofrecer servicios públicos esenciales de calidad. Esta es la reivindicación colectiva que emana de las Jornadas Municipalistas por una financiación justa. El encuentro se ha celebrado en el Palacio de Congresos de València entre ayer y hoy y a la misma han acudido el alcalde de Xàbia, José Chulvi, y el concejal de Hacienda, Antoni Miragall.

Estas Jornadas han reunido a alcaldes y concejales de ciudades de toda España, en las que, en total, hay representados más de 10’5 millones de ciudadanos. Las ha presidido el jefe del Gobierno Valenciano, Ximo Puig.

El eje central de las ponencias era la financiación local y las trabas que, desde el Gobierno de España, se pone a los municipios para disponer de sus recursos económicos, con independencia de que se trate de entidades saneadas o no. En este sentido, se ha recordado que los Ayuntamientos son la administración más cercana al ciudadano y que deben ofrecer servicios esenciales, de gran relevancia en la vida diaria de millones de personas, y que no pueden estar sujetos a las necesidades del Ministerio de Hacienda.

Se da la circunstancia de que, a causa de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración, los municipios ven fuertemente limitada su capacidad de decisión económica y han de dejar de prestar servicios esenciales o de acometer mejoras para gastarlo en aquello que se dicta desde Madrid.

Contra esta situación se han rebelado las principales ciudades de España y decenas de Ayuntamientos en el foro de València. Para el alcalde de Xàbia, José Chulvi, “el Gobierno no puede seguir dando la espalda a las necesidades de los Ayuntamientos que sí cumplimos con nuestras obligaciones y tenemos cuentas saneadas. Es incomprensible que tengamos remanentes de tesorería – tanto nosotros como la Diputación de Alicante, por ejemplo – y no los podamos gastar en mejorar las condiciones de vida de la gente porque una Ley nos dice que los bancos están primero”.