En el día de hoy, y tras otra “presentación” de un Plan Estratégico que avala todo lo que la plataforma Obrim el Centre ha venido diciendo en los últimos meses, nos encontramos con un artículo de opinión de la concejala de Comercio de Dénia, Sandra Gertrúdix, que agradecemos sinceramente.

Dice la edil, textualmente, que “aunque, insisto, este es un plan para todo el comercio de Dénia”, hay que pasar de nuevo por el “dilema de la peatonalización de calles como Marqués de Campo”. Y a continuación afirma que “en coche se va, únicamente, a realizar gestiones rápidas y muy localizadas (trámites bancarios, compras muy concretas y previamente decididas, visitas a despachos profesionales)”. Es decir, uno va a al centro de Dénia, donde hay oficinas bancarias, despachos profesionales y otro tipo de establecimientos, a trabajar y a realizar gestiones y a hacer compras rápidas y muy localizadas. Y por ello necesita acceder. En coche.

También reflexiona la concejala sobre qué significa “ir de compras” y concluye que este acto consiste en “pasear y mirar escaparates, entrar en las tiendas con calma, aprovechar la tarde en Dénia para tomar algo, también, en un bar, poder hacerlo acompañado de los niños”. Perfecto. No podemos estar más de acuerdo. Cuando se tiene tiempo libre, uno va a pasear con la familia si hace buen tiempo y los niños no están en el colegio.

Hace también Gertrúdix una explicación sobre los aparcamientos y la falta de señalización, y no podemos estar más de acuerdo con ella. Y concluye afirmando que “tenemos en nuestras manos una hoja de ruta profesional y muy clara: ese Plan de Comercio con el que nos comprometidos a dotar a la ciudad, como una de las medidas especiales para combatir la crisis derivada de la pandemia”.

Nos congratula ver que la opinión de la concejala coincide punto por punto con la nuestra. Ahora solo falta que -ya que por fin han sido entendidas las dinámicas del centro de Dénia- se hagan realidad todas estas reflexiones y el equipo de Gobierno reabra al tráfico la Glorieta y la Calle Marqués de Campo de la misma forma que se ha venido haciendo en los últimos años: de lunes a viernes abierta para trabajar; los fines de semana y festivos cerrada para pasear y disfrutar del tiempo de descanso.