Marina de Dénia es un ejemplo de que en tiempos de crisis la mejor opción es reinventarse y, sobre todo, continuar trabajando duro para seguir ofreciendo los mejores servicios. “El esfuerzo que hemos llevado a cabo en los últimos meses, para contener al tejido productivo de nuestro puerto, ha llevado a que tres empresas se fijen en estas instalaciones para llevar a cabo su desarrollo empresarial”, apunta Gabriel Martínez, director de Marina de Dénia.

A principios de julio abrió La Chuleta, un restaurante especializado en carnes rojas de alta calidad, en parrilla de carbón vegetal y en arroces. La Chuleta pertenece a La Parrilla de Juan Adán, un grupo empresarial consolidado en Madrid.

Y, en agosto, abrió Mala Mala, un nuevo local del grupo Javea Company, que ya cuenta con el restaurante Mala Vita en Marina de Dénia. También ha inaugurado Arrozes Cocina Mediterránea, del Grupo Vida Restauraciones, primera franquicia de comida mediterránea y expertos en paellas. Además, tienen servicio a domicilio gratuito.

“Esto ha supuesto un incremento considerable en el número de trabajadores que los tres restaurantes han contratado. Para nosotros esto es lo fundamental, que nuestros puertos deportivos y turísticos continúen generando riqueza y empleo”.