Una escena, un super yate y un contraste brutal en el puerto de Dénia (228 millones de euros)

24 de septiembre de 2019
24 de septiembre de 2019

Pues sí. Mientras unos trabajan por «despiezar» en Ferry Pinar del Río encallado en la bocana del Puerto de Dénia, otros trabajan para el mantenimiento del yate más grande y lujoso del mundo. Se acabó el «morbo» y el interés por el ferry. Ahora todos, cámara en ristre, a fotografiar esa barbaridad de barco propiedad de un jeque saudí y de nombre «Lady Moura». Una escena que ha engullido esa otra del barco varado. El contraste es brutal, quizá hasta ofensivo, tal como está el mundo de mal repartido. Además es seguro que el tal jeque no pisa la ciudad y los más de 60 tripulantes puede. Un personaje que incluso ha hecho esculpir su nombre en letras de oro de un montón de kilates a quien seguro no le cuesta esfuerzo alguno en calzarse los calcetines porque alguien se los calzará. Cierto que la imagen vende, que para el Puerto de Dénia y la ciudad es un reclamo que llegará a topo el país y medios informativos nacionales, tal vez hasta internacionales. Nada que discutir a ello. Pero el contraste invita a la reflexión del «unos tanto y otros, nada». O sea, barbaridad ostentosa que a algunos nos provoca reflexionar sobre los contrastes tan acusados que nos presenta la vida y que mantiene a los «grandes olvidados» muriendo incluso de hambre.