Seguramente se esperaba mucho más a tenor de los partes meteorológicos y las alertas decretadas para el fin de semana. Pero aunque la lluvia y el viento y menos las tormentas, fueron destacadas, se ciñeron a la madrugada del domingo. Sin embargo, los problemas de siempre se sitúan en el obligado cierre del Camí del Llavador y los accesos al María Ibars. La cantidad de agua caída ha sido mucho más importante en el interior de la Marina Alta en donde se han registrado más de 160 litros m2 mientras en Dénia o Xábia rondamos los 60. En Xábia el viento ha derribado un árbol y en la fachada marítima de Dénia, Blay Beach, Deveses, etc, las olas y el temporal de mar han hecho estragos como siempre, con el mar entrando en las fachadas de las viviendas más próximas. En cuanto a las obligadas suspensiones de ciertos actos, a destacar el de la Ermita y Romería de Santa Paula, la jornada de degustación en la Fiesta del Vino en Jesús Pobre o los encuentros y actividades deportivas infantiles en Dénia.
Lo peor ocurría en la madrugada del sábado en la que se registraba, probablemente por las condiciones climáticas, un accidente múltiple en la APT entre Benissa y Calpe con el resultado de tres muertos y cinco heridos de gravedad al ser arrollados por dos vehículos cuando auxiliaban a un tercero que se había salido de la carretera.