Se recrudece la situación del Dénia Futsal

4 de enero de 2018
4 de enero de 2018

El capítulo más espinoso que ha vivido el Dénia en toda su historia al margen del descenso obligado por impago después de militar en segunda B y las protestas de los jugadores luciendo camisetas denunciando esa situación de no cobros aunque jugaron sus partidos, está siendo el de la sección de Fútbol Sala. El último episodio se ha saldado con la primera multa que ha recibido el club por no presentarse ante el Hospitalet (1.600 euros) y la baja forzada que se le ha dado al capitán y portavoz de los jugadores Pablo Tarín. Pero no queda ahí todo el caos, puesto que la Presidenta Gema Estrela ha reclamado al delegado del equipo la devolución de las llaves de las instalaciones en las que entrena el equipo y la retractación de la alegación formulada en el acta del encuentro no jugado en el sentido de «maltrato». Al parecer la respuesta fue de no devolver nada hasta que no se liquide la deuda pendiente en los contratos. Y este es el quid de la cuestión, porque según unos, los jugadores poseen contratos por lo que podrían demandar al Club mientras la Presidenta niega haber firmado ningún contrato siendo el único documento vinculante, la firma de las fichas. El Dénia Fútsal debería jugar en casa del Linyolá pero el Club no está por la labor ante el desconocimiento de una situación que se le ha ido de las manos y que no ha terminado ni siquiera en el plano sancionador, porque una segunda incomparecencia supondrá la descalificación del equipo y una multa de unos 12.000 euros.

La Directiva está dispuesta a convocar una Asamblea el 19 de enero para que los socios se pronuncien y escuchen de primera mano, las circunstancias por las cuales se ha llegado a esta situación que presenta muchas incognitas que deben ser aclaradas sin mayor demora sobre todo por la imagen del Club y la ciudad.