Opinión de Pepa Font (GDCU) sobre el Plan General de Dénia

20 de octubre de 2017
20 de octubre de 2017

Un Plan General Estructural es la herramienta de la que se dispone en los municipios para ordenar y gestionar el territorio, implantando medidas que indican el futuro social y económico de la ciudad.

En este punto es donde empezamos a ver los primeros problemas del PGE que pretende aprobar el equipo de gobierno.

En sus objetivos generales, entre otros señalan que quieren impulsar el modelo de explotación turística hacia pautas territoriales sostenibles. Leído así queda muy bonito, pero luego cuando uno empieza a leer su propuesta se encuentra que el crecimiento de la ciudad en los próximos 20 años será prácticamente nulo.

No son capaces de indicar cuales serán sus medidas para “desestacionalizar el flujo turístico”. Indican que el suelo vacante en la zona de las Marinas será destinado a potenciar zonas de aparcamiento y demás servicios terciarios. ¿Quién pagará esas infraestructuras? ¿El Ayuntamiento o las empresas que no puedan tener crecimiento y se marcharan a otros municipios a trabajar?

Ya les digo yo que el Ayuntamiento no va a poder. La suspensión de la mayoría de los programas de desarrollo actuales, va a provocar a una gran cantidad de procesos judiciales que afectaran negativamente a las arcas municipales, que van a hipotecar el futuro de nuestra ciudad.
En este PGE la viabilidad económica brilla por su ausencia, al igual que los informes del Secretario Municipal e Interventor. Si los máximos asesores de los que dispone el Ayuntamiento no han emitido informes, como vamos a fiarnos de esta propuesta.

Proponen la transformación de la Ronda Norte en una vía Parque, eliminando prácticamente toda su posible edificabilidad. Preguntamos de nuevo quien va a pagar entonces la vía parque, el Ayuntamiento, la Generalitat, el Gobierno Central…
No se va a poder construir la Ronda Norte, el Ayuntamiento no tiene capacidad económica para realizar esta infraestructura.

No entendemos como se propone finalizar la Ronda playa-Torrecremada en la zona de les Vessanes sin aplicar medidas correctoras ya que es zona inundable, y tampoco se tiene en cuenta el incremento del tráfico, ya de por si caótico en la actualidad, en la zona escolar de la Plaza Jaume I.

Tampoco explican porque realmente se quiere construir una carretera paralela a la carretera de Ondara, desde la Xara hasta la Ronda Norte, “el exceso de tráfico que se dirige al puerto”, es la justificación, pero este problema es precisamente el que viene a resolver la Ronda Norte. Lo más grave es la destrucción de uno de los paisajes agrícolas más bonitos de Dénia, con casas centenarias y suelos agrícolas en uso.

Partidas tan características del paisaje rural de nuestra ciudad como El Tossalet, Les Tres Torres, Madrigueres Nord o Negrals, se van a ver partidas en mil pedazos por una carretera que no tiene ninguna finalidad concreta. Y lo más sorprendente es como solucionan su integración en el paisaje.: “entre una carretera y otra, zonas verdes ajardinadas y/o huertos urbanos”.
Si el futuro económico de nuestra ciudad es la creación de huertos urbanos, perfecto, adelante con ello, pero les recuerdo que solamente el 0,32 %, o sea 46 personas en Dénia tienen como empleo la Agricultura y Pesca, mientras que existen 2979 parados provenientes del sector servicios.

Además, contradice el Estudio de Paisaje, que indica “se velara para que cualquier actuación pública o privada evite elementos distorsionadores que pudieran romper las vistas hacia hitos culturales, naturales o el paisaje tradicional agrario, desfigurando su visión”
En este PGE no se reserva suelo para nuevas instalaciones hoteleras de ningún tipo, ni presentan ninguna propuesta de cómo desestacionalizar el turismo para poder generar empleo.

Y lo que a más ciudadanos de Denia perjudica es la limitación en la zona de Les Rotes-Montgó, donde no se determina parcela mínima para edificar pero tampoco se autorizan nuevas segregaciones por lo que el número de nuevas viviendas posibles es mínimo y sujeto a las parcelas actuales, sea cual sea su tamaño. A no ser claro, que solo queramos mega chalets que rompan con la idiosincrasia de la zona.

Un último tema nos parece surrealista, y no porqué nos sorprenda, sino por el empecinamiento del equipo de gobierno en seguir adelante con la instalación de la estación del tren de vía ancha en la zona de La Pedrera, ya preguntamos hace varios plenos a la Concejala de Territorio por su ubicación y el movimiento vecinal que se estaba generando en contra de la misma , además de las quejas vecinales, también nos encontramos con informes negativos de la Conselleria de Medio Ambiente y de la Junta Rectora del Parque Natural.
Rechazan la ubicación exactamente con los mismos argumentos que se utilizaron para rechazar la construcción de un Colegio Internacional en Jesús Pobre.

Sabemos desde GDCU que todas estas circunstancias reseñadas van a caer en saco roto. En todas las reuniones previas ya las hemos expuesto y no se ha tenido en cuenta. Como cuando el Sr. Chofre indicó que no se iban a proponer medidas correctoras en zonas potencialmente inundables como el polideportivo en Madrigueres Nord o Patricio Ferrándiz y dijo, sin ningún tipo de pudor, “que paguen los seguros, que eso con un poco de pintura se arregla”. Esperemos que solo sea pintura y no ocurra nada más grave.

Nuestra obligación es y será presentar alegaciones a todos estos errores e incongruencias que hemos detectado. Seguramente aparecerán más, pero la hoja de ruta del equipo de gobierno está trazada y lo que les digamos los partidos de la oposición y los vecinos no les importa.