Las informaciones periodísticas vuelven a poner el foco sobre otro caso de incumplimiento de los protocolos establecidos por la Generalitat Valenciana para la vacunación, esta vez en la capital de la comarca de la Marina Alta, y casualmente con otro cargo socialista, esta vez la 2ª Teniente de Alcalde, Cristina Morera.

La portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Dénia, Susana Mut ha manifestado “me duele profundamente en lo personal, por conocer a Cristina y haber trabajado junta a ella durante este tiempo. Ha sido una desagradable sorpresa y una tremenda decepción el conocer lo que ha pasado. Sólo espero que sepa dar la talla y se aparte voluntariamente de su puesto. Son demasiados casos en nuestra comarca y ya resulta indefendible cualquier nuevo caso. Debemos cortar de raíz esta cultura del abuso. Da vergüenza ajena tener que leer que hay políticos que se anteponen a ellos mismos y a sus favorecidos y allegados. Solo espero, que si hay más políticos locales que hayan caído en la misma circunstancia, reaccionen y se aparten voluntariamente antes de que tengamos más escándalos de este tipo”. Colocar a Dénia en el foco mediático otra vez por este tipo de circunstancias es insostenible, y Cristina Morera debe presentar su dimisión, como así manifestó su Secretario General y Presidente de la Generalitat Ximo Puig. La portavoz naranja ha señalado que “hemos tenido infinidad de reuniones de trabajo y en todo momento se nos ocultó esta vacunación irregular. Incluso cuando se hablaba de las vacunaciones irregulares de El Vergel y Els Poblets, sus compañeros de partido les justificaron y ahora, desgraciadamente, entendemos porqué”

El Grupo Municipal Ciudadanos solicitará una investigación para esclarecer las circunstancias que llevaron a la vacunación irregular de la concejala socialista y quien más se vacunó con el resto de vacunas sobrantes en la Residencia de Santa Lucia, que en un principio iban destinadas a los residentes, pero que al dar positivo por COVID, fueron destinadas a personas no autorizadas por los protocolos sanitarios.

La posición de Ciudadanos desde que estallara la crisis de vacunaciones ilegales en todo el país, ha sido siempre la misma, exigir la dimisión de los cargos públicos vacunados saltándose las normas, ya que su falta de ética pone en entredicho el buen hacer de muchos servidores públicos.